El caudillo volvió: entre libros y aplausos, la política real se mueve tras bambalinas y el poder vuelve a concentrarse.
Por Rebeca Solano
La reaparición pública de Andrés Manuel López Obrador desde su rancho “La Chingada”, con la presentación de su libro La Grandeza, desató una fuerte lectura política: el expresidente no volvió como autor, sino como caudillo. Así coincidieron Donato Flores, Martín Quitano y Víctor Andrade en el más reciente episodio del podcast En Plural, donde advirtieron que el país ha entrado en una fase más oscura de concentración de poder.
Para Víctor Andrade, el regreso de López Obrador era previsible. “Los caudillos siempre regresan”, afirmó, al señalar que el exmandatario no tolera el retiro político y mantiene un comportamiento marcado por narcisismo y sentido mesiánico. Su reaparición, subrayó, expone la dependencia política de Claudia Sheinbaum, configurando una diarquía similar al viejo esquema Calles–Obregón, donde uno gobierna y otro manda.
Martín Quitano fue más duro. Sostuvo que el libro La Grandeza no busca reivindicar la historia ni las culturas prehispánicas, sino alimentar una visión megalómana del poder. Mientras López Obrador presume un país “feliz, feliz, feliz”, la realidad muestra hospitales sin medicinas, violencia persistente, carreteras tomadas, extorsión criminal y un creciente enojo social.
Para Donato Flores y Quitano, el regreso del expresidente no fue casual. AMLO detectó fracturas internas en Morena, pugnas de poder, presiones sobre el gobierno de Sheinbaum y escándalos que golpean a su entorno cercano. En ese contexto, su irrupción intenta contener el desorden, pero termina exhibiendo la fragilidad de la presidenta, quien aparece más dependiente que fortalecida.
El episodio abordó también el relevo en la Fiscalía General de la República: la salida de Alejandro Gertz Manero y la llegada de Ernestina Godoy. Donato Flores calificó el movimiento como “desaseado por donde se le vea”, al señalar que el gobierno evadió un proceso constitucional claro y optó por presiones en la sombra, exhibiendo debilidad institucional más que autoridad.
Víctor Andrade advirtió que con Godoy se cancela cualquier apariencia de autonomía en la Fiscalía. Anticipó un escenario de impunidad para aliados, blindaje de escándalos —huachicol fiscal, contratos millonarios, contrabando de armas y vínculos criminales— y persecución selectiva contra adversarios.
Martín Quitano coincidió en que la designación representa la muerte del ideal de una fiscalía autónoma, una farsa que se replica en los estados, particularmente en Veracruz, donde las fiscalías se ajustan al gusto del poder en turno.
El cierre del podcast fue contundente: mientras López Obrador reaparece como figura moral autoproclamada, el país enfrenta más violencia, mayor opacidad, justicia politizada e instituciones debilitadas.
“No es solo el regreso del caudillo —concluyó Donato Flores—, es el regreso de un tipo de poder que creíamos haber dejado atrás”.
