Asesinan a líder limonero Bernardo Bravo; ya son cinco productores ejecutados en Michoacán
Por Rebeca Solano
Desde hace tres años, la Asociación de Citricultores mantiene una cruzada contra las extorsiones del crimen organizado en Michoacán, una lucha que ha cobrado la vida de varios de sus integrantes.
En julio de 2023, el sector agrícola y comercial del limón en Apatzingán y Buenavista se paralizó por primera vez ante los cobros de piso: un peso por kilo, dividido en 50 centavos por kilo cortado y 50 centavos por kilo comercializado. Tras un mes de suspensión, las autoridades prometieron frenar las extorsiones y detener a los responsables, pero los abusos continuaron.
Para 2024, el grupo criminal Los Viagras y sus aliados duplicaron las cuotas: un peso por kilo cortado y otro peso por kilo comercializado, un incremento que derivó en nuevas amenazas y ataques contra los productores.
Limoneros asesinados
El más reciente crimen fue el de Bernardo Bravo Manríquez, presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán y de la Asociación Nacional de Citricultores en México, asesinado el 20 de octubre de 2025.
Bravo había sido secuestrado un día antes por hombres armados en una zona controlada por el Cártel Michoacán Nueva Generación (CMNG), y recibía amenazas por los paros y denuncias públicas contra la extorsión.
Su asesinato lo convierte en el quinto productor de limón ejecutado en poco más de un año:
- José Luis Aguiñaga Escalera, asesinado el 12 de septiembre de 2024 en Buenavista.
- Ramón Paz Salinas, productor y profesor rural, murió el 14 de enero de 2025 al estallarle una mina artesanal en Apatzingán.
- El 9 de febrero, otro productor de 43 años y un adolescente de 14 murieron por un artefacto explosivo en Santa Ana, Buenavista.
- En septiembre de 2025, un productor de Apatzingán fue hallado muerto a tiros en la carretera Parácuaro–Cuatro Caminos.
Violencia contra el sector citrícola
El 20 de noviembre de 2024, integrantes de la alianza Viagras–Cártel Jalisco Nueva Generación incendiaron un empaque y centro de acopio de limón en Apatzingán, dentro de las instalaciones de una empresa ubicada en Cenobio Moreno.
El ataque fue adjudicado al grupo autodenominado Cártel de Michoacán Nueva Generación, responsable también de otras agresiones en la región.
Extorsionadores detenidos
Esta semana, fuerzas federales detuvieron a Rigoberto López Mendoza, alias “El Pantano”, identificado como encargado del cobro de piso a los limoneros del Valle de Apatzingán.
De acuerdo con fuentes de seguridad, “El Pantano” sería el autor intelectual del homicidio de Bernardo Bravo Manríquez, líder de los citricultores que se oponían al control criminal.
Con este nuevo asesinato, los productores de limón en Michoacán viven bajo un régimen de terror, entre cuotas impuestas por el crimen organizado, impunidad persistente y una débil respuesta del Estado frente a la violencia que asfixia al campo michoacano.