
Arde Apatzingán
Por Rebeca Solano
- Durante protesta por el asesinato del alcalde de Uruapan
La violencia escaló este lunes en Apatzingán, Michoacán, cuando un grupo de manifestantes incendió el Palacio Municipal durante una protesta por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo. Los inconformes irrumpieron en el edificio, causaron destrozos y prendieron fuego a las oficinas gubernamentales, mientras el caos se extendía en el centro de la ciudad.
De acuerdo con reportes locales, los asistentes —muchos con el rostro cubierto— forzaron las puertas del ayuntamiento, rompieron mobiliario y aparatos electrónicos, mientras el fuego consumía varias áreas del inmueble. Bomberos y elementos de seguridad arribaron al lugar para intentar sofocar el incendio.
Exigen justicia por el asesinato de Carlos Manzo
La protesta en Apatzingán forma parte de una ola de movilizaciones en Michoacán que exige justicia por el crimen del alcalde Carlos Manzo, asesinado días atrás en Uruapan. Las manifestaciones se han tornado violentas, derivando en enfrentamientos con la policía y daños a edificios públicos.
Los inconformes también demandan castigo por el homicidio de Bernardo Bravo, líder de los productores citrícolas del Valle de Apatzingán, presuntamente asesinado por el grupo criminal Los Blancos de Troya, una de las células más violentas que operan en la región.
Protestas se extienden a Morelia
En Morelia, capital del estado, se registraron dos días consecutivos de protestas frente al Palacio de Gobierno, donde hubo daños al patrimonio histórico y al menos 12 detenidos.
Ante la escalada de violencia, autoridades estatales reforzaron la seguridad en varios municipios por temor a que las movilizaciones se extiendan. Hasta el momento, no se reportan víctimas por el incendio en el Palacio Municipal de Apatzingán, aunque los daños materiales son cuantiosos.
