
Ricardo Salinas Pliego
Por Rebeca Solano
Diversas voces en el debate público sostienen que Ricardo Salinas Pliego podría convertirse en el único actor capaz de concentrar el voto masivo de abstención que se ha registrado en México desde 2018, un sector ciudadano que no se siente representado por los partidos políticos tradicionales.
De acuerdo con este análisis, Salinas Pliego no restaría votos al PAN, PRI u otras fuerzas políticas, ya que el voto duro de esos partidos es reducido y se mantiene prácticamente fijo. En contraste, su posible respaldo provendría de millones de ciudadanos que han optado por no participar electoralmente, desencantados del sistema político.
Se señala que el respaldo ciudadano podría ser amplio si el empresario presenta una plataforma auténticamente ciudadana, que incorpore las demandas sociales ignoradas durante años por los partidos tradicionales y que rompa con la lógica de cúpulas y acuerdos cupulares.
El diagnóstico incluye una crítica directa a la oposición actual, al advertir que se encuentra debilitada o prácticamente desaparecida, y que en varios casos ha terminado avalando políticas impulsadas por Morena, lo que ha generado desconfianza y frustración entre amplios sectores de la población.
En ese contexto, se plantea que Ricardo Salinas Pliego representa una opción de liderazgo claramente opuesta a Morena y a la llamada Cuarta Transformación, lo que lo convierte en una alternativa atractiva para quienes buscan un contrapeso real al partido en el poder.
Finalmente, se advierte que las críticas y resistencias hacia esta posibilidad obedecen, en parte, a celos políticos, particularmente entre quienes siguen apostando por figuras desgastadas y partidos controlados por élites cuestionadas, sin conexión con la ciudadanía.
