
EE.UU. y China redefinen el orden mundial
Por Rebeca Solano
La reciente postura internacional de Donald Trump y la respuesta estratégica de la República Popular China sugieren que el mundo atraviesa una transformación profunda en el sistema global de poder.
De acuerdo con diversos análisis, Estados Unidos, bajo el liderazgo de Trump, está abandonando la noción de un “orden liberal basado en reglas”, lo que representa una ruptura histórica con la política exterior tradicional de Washington y abre espacio para el avance de China.
Por su parte, Beijing aprovecha el repliegue estadounidense para promover su propio modelo de gobernanza global, sustentado en un mundo multipolar, menos dependiente de los valores occidentales y más centrado en la soberanía nacional y los intereses económicos de cada Estado.
La consecuencia directa es clara: la hegemonía estadounidense se debilita mientras China gana influencia política, tecnológica y diplomática, redefiniendo las normas, instituciones y alianzas internacionales que dominaron el siglo XX.
En suma, lo que antes parecía una rivalidad bilateral se ha convertido en una reconfiguración estructural del orden mundial, donde la retirada de EE.UU. y el ascenso de China podrían marcar el inicio de una nueva era geopolítica.
