
Habitantes del norte de Veracruz critican ayuda estatal tras inundaciones
Por María Fernández
Habitantes afectados por las recientes lluvias y desbordamientos del río Cazones expresaron su descontento por la ayuda enviada por el gobierno estatal encabezado por Rocío Nahle, luego de que circularan videos en redes sociales donde los damnificados “agradecían” irónicamente el envío de sueros y electrolitos como parte del apoyo oficial.
Las intensas lluvias registradas entre el 9 y 10 de octubre provocaron inundaciones en diversos municipios del norte, principalmente Poza Rica, Cazones, Álamo-Temapache y Papantla, donde cientos de familias resultaron afectadas. El desbordamiento del río Cazones dejó viviendas bajo el agua, calles intransitables y daños en escuelas, carreteras y servicios básicos.
De acuerdo con Protección Civil, al menos 22 municipios fueron catalogados como zonas con afectaciones severas, aunque los esfuerzos de ayuda continúan de manera intermitente.
En un video difundido en redes sociales, mujeres de Poza Rica sostienen botellas de suero frente a sus casas inundadas y pronuncian en tono sarcástico:
“Gracias a la gran gobernadora Rocío Nahle, gracias por el apoyo. Gracias por los electrolits que nos está mandando para el ligero susto que ha ocasionado el desbordamiento del río Cazones.”
Las risas que acompañan el mensaje reflejan la inconformidad de los vecinos ante la entrega de insumos considerados insuficientes frente a la magnitud de los daños.
Los testimonios señalan que la ayuda se ha limitado a bebidas rehidratantes, paquetes básicos de despensa y agua embotellada, sin maquinaria para limpiar calles o remover lodo. En comunidades como Poza Rica y Álamo, no se han entregado colchones, cobijas ni herramientas de reconstrucción.
La gobernadora Rocío Nahle informó que las autoridades continúan evaluando los daños y que los apoyos se entregan conforme al registro de viviendas afectadas, trabajando en coordinación con Protección Civil y la Secretaría de la Defensa Nacional. Sin embargo, los testimonios reflejan que existe una percepción de que los apoyos son simbólicos y no corresponden al nivel de pérdida enfrentado por muchas familias.
A más de diez días de las lluvias, varias comunidades continúan con lodo acumulado, cortes de electricidad y falta de agua potable, algunas escuelas suspendieron actividades, y los habitantes aseguran que alimentos y artículos de limpieza escasean. Se espera que autoridades federales inicien la evaluación de daños y la entrega de apoyos económicos a las familias registradas.
