De acuerdo a una reflexión matutina de Edwin Corona y Cepeda, publicada en Notiver On Line, revelan que existe la intención del presidente municipal de Veracruz, Fernando Yunes Márquez, de querer cerrar el zoológico Miguel Ángel de Quevedo, para vender el terreno, ya que, debido a la plusvalía tiene un alto valor económico.
Trasciende que existen interesados en establecer en el terreno del zoológico Miguel Ángel de Quevedo, una plaza comercial y un fraccionamiento con condominios de lujo.
El zoológico Miguel Ángel de Quevedo, tiene cerca de 90 años de que fue fundado por el director del Departamento Forestal de la Secretaría de Agricultura y Ganadería, Miguel Ángel de Quevedo, como reserva vegetal y jardín botánico, y poco a poco se convirtió en el zoológico de Veracruz.
En el periodo de gobierno de Roberto Bueno Campos, el zoológico fue reinaugurado y en 1960 tomaron de ejemplo el serpentario del Zoológico de Tuxtla Gutiérrez en Chiapas, por lo que fue colocado un serpentario en el que se mostraban más de 60 especies de serpientes e insectos.
Cabe mencionar que a pesar del escaso presupuesto destinado por las autoridades municipales de Veracruz, el zoológico Miguel Ángel de Quevedo se encontraba operando de manera adecuada.
Sin embargo, en el 2010 el huracán Karl daño el lugar destruyendo árboles, techos, jaulas y mallas, dejando en el mayor desamparo a varias especies animales.
Fue en las administraciones de Julen Rementería y Jon Rementerería que comenzó el abandono del zoológico, ocasionando así la decadencia del inmueble.
En la administración de la ex alcaldesa, Carolina Gudiño Corro en el 2011, realizó la inversión de un millón de pesos, que fue utilizado para la rehabilitación de la clínica animal, área de cuarentena, la oficina administrativa y caseta de acceso, se impermeabilizaron algunos techos y lozas y se resanaron y pintaron varios muros y plafones, además, la entrada del acceso principal.
Además aumentó el censo animal, esto con el nacimiento de dos tigres de bengala, las donaciones de un cerdo vietnamita, una cabra enana, una pantera y varios halcones.
Hay que mencionar que a pesar del esfuerzo de conservación, realizado por la ex presidenta municipal de Veracruz, Carolina Gudiño Corro, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) decomisó, sin que al momento se sepa dónde quedaron 92 animales salvajes.
Durante el periodo del ex alcalde Ramón Poo Gil continúe el rezago del zoológico Miguel Ángel de Quevedo, ya que, un tigre de bengala fue enviado probablemente vendido a Estados Unidos, permitiendo el arribo de varios animales decomisados por la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) de la PROFEPA, aumentando la sobrepoblación animal.
“El desorden y desbarajuste de la administración municipal es visible ya que cualquier visitante puede observar que las aguas donde habitan animales anfibios como cocodrilos y tortugas permanecen con agua estancada que forma una verdadera nata de porquería. Otros animales, como el camello, optan por beber su orina al no proporcionársele un recipiente adecuado donde beber y los esfuerzos que realizan los trabajadores que limpian el zoológico y los alimentan, así como el de los veterinarios y zootecnistas que cuidan de su salud son esfuerzos en vano, ya que los recursos que a ello deberían destinarse, seguramente son desviados”, indica la publicación de Edwin Corona y Cepeda.