El ex gobernador del estado de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, a través de una carta enviada al periodista Ciro Gómez Leyva, dijo que sonrió durante su detención, ya que, todo era un ‘show mediático’ y se declaró culpable porque no tenía probabilidades de ganar el juicio.
Duarte de Ochoa, señaló que en su caso particular todo ha sido un espectáculo mediático, una telenovela que han sabido vender bien a la opinión pública, donde las autoridades responsables han promovido sus actuaciones.
"En mi caso en particular, todo ha sido un espectáculo mediático, una telenovela que han sabido vender muy bien a la opinión pública, y lo digo así una verdadera telenovela, un circo romano, en donde las autoridades responsables han promovido sus actuaciones".
El ex mandatario de Veracruz, mencionó que la Procuraduría General de la República (PGR) está haciendo una mala investigación, ya que, las acusaciones en su contra sólo estuvieron sostenidas simplemente por los dichos de delincuentes confesos que tuvieron beneficios por acusarlo.
"Cabe resaltar que a la mayoría de estas ni las conozco y por lo tanto nuca tuve trato alguno con ellos".
Javier Duarte de Ochoa, mencionó que en su caso, no existe una sola prueba documental, cuenta bancaria o propiedad a su nombre o su familia se le pudo comprobar aumento alguno en su patrimonio durante su administración.
“No existe una sola prueba documental, cuenta bancaria o propiedad a su nombre o de su familia, y tampoco se le pudo comprobar aumento alguno en su patrimonio durante su administración”.
El ex gobernador del estado de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, dijo que el subprocurador de Delitos Federales de la PGR, Felipe Muñóz Vázquez le explicó que estaría absuelto y libre si se hubiera ido a juicio y no a procedimiento abreviado.
Indicó que prefirió el procedimiento abreviado por la campaña tan intensa y exitosa que desarrollado en mi contra.
Señaló que la campaña mediática ha sido implacable, las autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) han cometido todo tipo de abusos.
"Esta campaña de linchamiento público me ha colocado frente a la sociedad mexicana como culpable de todo lo que se me acusa, violando con ello de manera reiterada el principio de presunción de inocencia".
Duarte de Ochoa, mencionó que por lo anterior y en contra de su voluntad, tuvo que aceptar declararse culpable, "la opinión pública y la sociedad, ya me habían juzgado, y bajo esas circunstancias el riego de enfrentarme contra el sistema y perder era muy alto.
