Jueves, 28 de marzo de 2024

  • Desabasto de insulina

Miente Ramos Alor a enfermos de diabetes

  • El gobierno estatal de Veracruz a través de la Secretaría de Salud, mantiene un desabasto general de medicinas
Viernes, 15 Marzo 2019
  • Por:  Silvia Núñez Hernández

 

Enfermos de diabetes, denuncian que el Hospital General de “Alta Especialidad” de Veracruz, mantiene un desabasto de insulina, el cual es el medicamento principal que los diabéticos se administran para llevar un control de glucosa en la sangre y mantener estables sus niveles; el no aplicárselos podría poner en riesgo su vida y en algunos casos hasta ocasionarle la muerte. 

El sábado 9 de marzo del 2019, AGN Veracruz hizo contacto vía mensajería de WhatsApp con el secretario de Salud, Roberto Ramos Alor, para solicitarle una entrevista y  conocer las causas del desabasto de insulina y éste únicamente se centró a responder en dicha mensajería: “Tendrán insulina suficiente” y no volvió a responder pese a la insistencia de una declaración. 

“Buen día, Silvia (…) Me pongo en contacto con usted para manifestar mi preocupación a causa de que desde el sábado 9 de marzo, he venido al Hospital General para solicitar con mi receta para que me la surtieran la insulina en farmacia y me salen que no hay (…) El licenciado Bruno (encargado de adquisiciones en el hospital) se encontraba de vacaciones y de ahí pasé con la licenciada Elizabeth Morgado y ella me dijo que viniera el lunes para que lo “checara” con Recursos Materiales con Juana Mendoza”, acusó Luis Galguera, enfermo que en la actualidad sufre de pie diabético, condición que le impide movilizarse en transporte público, orillando que tenga trasladarse a través de taxi, pues no cuenta con automóvil propio.

El lunes 11 de marzo volvió a las instalaciones del Hospital General para contactar con la licenciada Juana Mendoza, la cual notificó al paciente que el medicamento llegaría al hospital el viernes 15 de marzo sin falta. 

Luis Galguera advierte que le explicó a la titular de Recursos Materiales, Juana Mendoza que si sería “seguro” la entrega de la insulina para ese día, pues padece de pie diabético y contaba con tres heridas que le impedían caminar adecuadamente –además del dolor que este hecho le originaba-. 

“Me dijo que el viernes yo pasara, o sea hoy entre 11 ó 12 (…) Fui a la hora que me indicó y en farmacia me volvieron a negar la insulina (…) No ha llegado (…) Dese una vuelta la semana que entra (…) Subí a Recursos Materiales de nuevo a hablar con la “licenciada Juanita” y me dijo que ya la tenía encargada pero que de seguro ya estaba por llegar mañana en la tarde”. 

Deshumanizados el personal del Hospital General de Veracruz, violentan los derechos humanos de los pacientes de bajos recursos que se atienden en el nosocomio a través del Seguro Popular, al poner en riesgo su vida por negarles el medicamento necesario para mantener controlado su enfermedad. 

“Es muy peligroso para mí estar yendo al hospital en este momento (…) Hace meses, por otras heridas que se me produjeron a causa del pie diabético, me “atendieron” en el hospital supuestamente (…) Pero por la insalubridad que mantienen en las instalaciones, me contagié de una bacteria de nombre estafilococo y estuve hasta peor pues a pesar de que me dieron el medicamento, la herida empeoró y mejor me fui a mi casa a curarme de la infección que había recogido ahí”. 

La encargada de Recursos Materiales, Juana Mendoza notificó al paciente que tendría que ir el día de mañana a “ver si la insulina llegaba” y que era necesario, que asistiera porque el día lunes 18 de marzo, era día de asueto y el personal de su área y de farmacia, no irían a trabajar para atender a los pacientes que requieren medicamento. 

Hay que mencionar que muchos de los enfermos que acuden al Hospital General de Veracruz, en busca de atención médica o medicinas, se trasladan de diferentes municipios de Veracruz, y el personal el hacen padecer un verdadero calvario.

El gobierno estatal de Veracruz a través de la Secretaría de Salud, mantiene un desabasto general de medicinas, acto que pone en riesgo la vida de quienes no pueden pagar la atención en hospitales privados.

 

 

 

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