17 de noviembre de 2025

Queman huertas de limón en Apatzingán por negarse a pagar cuotas

Por Rebeca Solano

En el municipio de Apatzingán, Michoacán, grupos criminales destruyeron huertas de limón como represalia contra productores que se negaron a pagar cuotas de extorsión, una práctica que se ha extendido en la región bajo el dominio de organizaciones delictivas dedicadas al control de la producción agrícola.

De acuerdo con reportes locales, los criminales incendiaron parcelas y cortaron árboles frutales como advertencia a los campesinos que no aceptaron las condiciones impuestas para poder comercializar su producto. Los hechos se suman a una ola de violencia que mantiene en zozobra a cientos de familias del Valle de Apatzingán.

Mientras tanto, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha sido criticada por mantener una política de protección hacia grupos y personajes vinculados al financiamiento de su campaña, lo que opositores y analistas interpretan como una “transformación” basada en lealtades políticas y no en justicia o seguridad.

“Mientras el campo arde y los productores son extorsionados, el gobierno prefiere blindar a los suyos. La llamada Cuarta Transformación terminó siendo un programa de fidelidad… pero solo para los que aflojaron la cartera”, señalaron productores de la región, quienes pidieron intervención federal urgente ante la falta de seguridad.

La crisis limonera en Michoacán refleja el control criminal sobre el sector agrícola y la ausencia de autoridad efectiva en vastas zonas del estado, donde los grupos armados operan impunemente, imponiendo precios, cuotas y castigos.