17 de noviembre de 2025

Corrupción y desfalco marcan el gobierno de Alejandro García en Coetzala  / Internet

Por Alberto Mejía

El gobierno municipal de Coetzala, encabezado por Alejandro García Hernández, concluirá su administración envuelto en señalamientos por corrupción, desvío de recursos, simulación y uso sistemático de facturas falsas. A lo largo del cuatrienio, el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) documentó irregularidades graves en obra pública, nómina y servicios, sin que hubiera transparencia ni rendición de cuentas.

Aunque la administración presumió una supuesta «liberación de deuda pública», lo cierto es que no existía financiamiento bancario registrado, mientras que sí hay adeudos millonarios vigentes, entre ellos 2.5 millones de pesos con el SAT por omitir pagos de ISR, un millón con el IPE y 1.5 millones reconocidos ante el ORFIS como deuda activa.

Durante su gestión, García Hernández operó con absoluta opacidad. Ocultó contratos, manipuló cifras y restringió el acceso a la información pública. Medios afines al gobierno difundieron únicamente contenidos aprobados por el alcalde, quien además bloqueó a periodistas críticos e integra el padrón estatal de agresores por violencia política de género.

Con el argumento de la “disciplina financiera”, se cancelaron proyectos prioritarios y se dejaron comunidades abandonadas. Calles destruidas, obras inconclusas y servicios colapsados fueron la constante, mientras se usaban empresas fantasma para inflar gastos mediante facturación apócrifa.

De cara al proceso de entrega-recepción, la sociedad exige al alcalde electo, Geremías Nereo Apale Tehuintle, una auditoría exhaustiva al gobierno saliente. La expectativa es clara: romper con el pacto de impunidad, investigar los desvíos y presentar denuncias penales para sancionar el saqueo al erario municipal.