Claudia Sheinbaum y Andrés Manuel López Obrador / Vídeo
Por Rebeca Solano
- Acuerdo con EU amenaza con exhibir red de complicidades
El acuerdo judicial de Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”, con el Departamento de Justicia de Estados Unidos amenaza con detonar un terremoto político en México, al incluir no solo su confesión, sino un arsenal de pruebas, nombres y documentos que podrían revelar una extensa red de complicidades entre el narcotráfico, la política y sectores empresariales.
De acuerdo con el empresario y exfuncionario de la 4T, Simón Levy, el pacto alcanzado por Guzmán en la corte federal de Chicago no se limita a reconocer su responsabilidad, sino que implica colaboración plena con las autoridades estadounidenses: entregar información sobre rutas de trasiego, contactos políticos y empresariales, así como testificar bajo juramento en futuros juicios.
Políticos y militares en la mira
Levy aseguró en X (antes Twitter) que el acuerdo incluye nombres de políticos de alto nivel, empresarios, mandos militares y hasta conexiones internacionales en Medio Oriente e Irán. Según fuentes cercanas al caso, los puntos más sensibles del documento contemplan la entrega de pruebas físicas, correos, grabaciones, fotografías y evidencias directas.
Esta colaboración, afirman, pone en riesgo a exgobernadores, funcionarios federales y miembros actuales del gabinete, lo que podría derivar en investigaciones de alcance global contra el círculo más cercano del presidente Andrés Manuel López Obrador y de la actual mandataria, Claudia Sheinbaum.
Una investigación de escala internacional
El señalamiento confirma lo que durante años se mencionó en rumores y filtraciones: que el narcotráfico no solo financia operaciones criminales, sino estructuras políticas y económicas a nivel transnacional. La inclusión de bancos internacionales y empresarios en la lista refuerza la idea de que el negocio del fentanilo y otras drogas opera con redes que alcanzan gobiernos y corporaciones globales.
La referencia a videos de los hijos de López Obrador recibiendo dinero y a supuestas reuniones en Sinaloa, ahora, adquiere un nuevo contexto dentro del entramado de pruebas. “Ovidio no va a caer solo”, advirtió Levy, al recalcar que el testimonio del capo podría detonar extradiciones y juicios en cortes extranjeras, como ha ocurrido con expresidentes de otros países latinoamericanos.
El temblor político en México
Aunque el gobierno mexicano no ha reaccionado oficialmente, en círculos políticos se percibe un clima de silencio y nerviosismo. La llamada “Cuarta Transformación”, que basó su legitimidad en el combate a la corrupción, enfrenta ahora la posibilidad de ser señalada en cortes internacionales por complicidad con el narcotráfico.
“El futuro político y moral de México está en manos de un testigo que ya decidió hablar”, escribió Levy, al advertir que el acuerdo de Guzmán representa un riesgo sin precedentes para el obradorismo, al exponer que su mayor enemigo no estaba fuera, sino dentro de sus propias filas.