18 de octubre de 2025

Alan Riding: 40 años después, “Vecinos distantes” retrata a un México dividido y en transición política

Por Rebeca Solano

Hace 40 años, el periodista británico Alan Riding publicó Vecinos distantes, un retrato de los mexicanos, obra calificada por Carlos Fuentes como un “clásico”. Riding documentó acontecimientos clave como el golpe a Excélsior en 1976, adelantó la creación de Proceso y ofreció una mirada crítica sobre la política mexicana.

En entrevista con Proceso, Riding afirmó que México es hoy un país profundamente dividido, donde las políticas de Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum buscan dar voz a sectores marginados, pero sin transformar las estructuras profundas. Destacó que su libro sigue siendo relevante para entender más de 50 años de historia política, desde el dominio del PRI hasta los retos democráticos actuales.

Entre sus reflexiones más destacadas:

  • La ruptura del contrato político entre el Estado priista y las clases medias tras la crisis económica de 1982-83, marcando el declive del modelo de partido único.
  • López Obrador intentó revivir un modelo de partido dominante, manteniendo formalidades democráticas mientras desmantelaba instituciones, especialmente con la reforma judicial.
  • Escándalos de corrupción, como el caso del huachicol fiscal, debilitan su influencia.
  • Sobre Sheinbaum: carece del “afán vengativo” de AMLO y ha manejado con cautela las relaciones internacionales, aunque su capacidad para consolidar el poder dentro de Morena es incierta.
  • Señala que Morena enfrenta fragmentación y advierte que mantener la unidad será difícil, a diferencia del PRI, que conservaba cohesión por intereses de poder.

Riding concluye que:

“Lo único claro es que, por muy serios que sean los problemas que Trump imponga a México, sólo los propios mexicanos podrán resolverlos… Una política que polarice aún más está condenada al fracaso. Si Sheinbaum se atreve, podría trazar una vía distinta a la 4T, pero requerirá valor e imaginación.”

Este análisis se suma a su obra como un retrato crítico de México desde una perspectiva externa, reafirmando la vigencia de Vecinos distantes como testimonio político y social.