Secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio
Por Rebeca Solano
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, afirmó de manera contundente que Nicolás Maduro fue acusado formalmente por un jurado federal, y que existen pruebas y cargos que lo vinculan a una estructura criminal que opera desde el propio Estado venezolano. Las declaraciones se dieron durante una gira de Rubio en Israel, donde se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu, en conversación con el periodista Gillian Turner de Fox News.
Rubio aclaró que no se trata de una recompensa simbólica, sino de una gratificación para incentivar la captura de personas acusadas formalmente, y que esta fue recientemente incrementada. El funcionario estadounidense insistió: “No solo es él. Hay toda una red de personas en Venezuela que han utilizado el aparato del gobierno para operar una estructura de narcotráfico dirigida contra Estados Unidos”.
Acusación formal y red criminal
El caso, recalcó Rubio, no es un diferendo diplomático, sino una investigación criminal seria. El Distrito Sur de Nueva York emitió cargos en contra de Maduro y sus colaboradores, quienes presuntamente utilizan instrumentos del Estado para traficar drogas hacia Estados Unidos, conformando lo que se conoce como el Cartel de los Soles.
“No vamos a permitir que un cartel se haga pasar por gobierno y opere en nuestro hemisferio”, señaló Rubio, enfatizando que Maduro es fugitivo de la justicia estadounidense y que su captura es prioritaria para proteger la seguridad nacional.
Estrategia internacional y respaldo global
Rubio destacó que la postura de Estados Unidos cuenta con el respaldo de más de 50 países, incluidos gobiernos latinoamericanos y europeos, que no reconocen la legitimidad del cargo presidencial de Maduro. Según Rubio, la estrategia estadounidense busca desarticular la infraestructura criminal del Cartel de los Soles, más que promover un cambio de régimen político.
“Cuando envías drogas a Estados Unidos, no es solo un problema interno de Venezuela, es una agresión directa a nuestra seguridad nacional”, subrayó, dejando claro que la acción estadounidense se centra en la captura de fugitivos y el combate al narcotráfico, no en la política interna venezolana.
Operaciones y gratificación
La política de disuasión incluye acciones concretas del ejército y agencias federales contra los responsables del tráfico de drogas desde Venezuela y el Caribe. Rubio indicó que la gratificación por información que conduzca a la captura de Maduro tiene un objetivo práctico: desmantelar la red criminal y garantizar la seguridad hemisférica y de la salud pública estadounidense.
En sus palabras, “el foco está en la captura de fugitivos y en desestabilizar una estructura que representa una amenaza directa para Estados Unidos”, reforzando que la justicia y la protección nacional están por encima de cualquier cuestionamiento sobre injerencia internacional.
