Semefo / Internet
Por Redacción
La propaganda oficial del gobierno municipal de Orizaba no resistió ni 24 horas. Un hombre fue ejecutado mientras circulaba en bicicleta cerca de la Unidad El Mirador, en los límites con Ixtaczoquitlán, apenas un día después del despliegue del operativo “Verano Seguro 2025”, con el que autoridades municipales, estatales y federales prometieron entornos más seguros.
La víctima fue interceptada por sujetos armados que le dispararon en varias ocasiones, sin que ninguna patrulla ni sistema de videovigilancia lograra impedir el ataque. El lugar fue acordonado por elementos de la Marina, Guardia Nacional y Policía Municipal, quienes únicamente realizaron labores de aseguramiento de la escena y levantamiento de indicios.
El operativo, presentado con bombo y platillo por el alcalde Juan Manuel Diez Franco, contemplaba el despliegue de casi 500 elementos de seguridad, módulos de atención ciudadana y recorridos preventivos. Sin embargo, el asesinato dejó al descubierto que la violencia continúa desbordada en la región.
Pese al discurso de “orden y progreso” del edil orizabeño, la estrategia de seguridad no ha logrado contener la escalada de ejecuciones que azota a la zona centro de Veracruz. Ni los arcos de seguridad, ni el Centro de Comando, ni los despliegues con uniformes relucientes han impedido que el crimen organizado siga imponiendo su ley.
