Inflación subyacente seguirá presionando el poder adquisitivo hasta 2026
Por Rebeca Solano
El Banco de México (Banxico) anticipó que la inflación, especialmente en los rubros de alimentos, servicios y vivienda, mantendrá presiones al alza durante lo que resta de 2025 y la primera parte de 2026, lo que se traducirá en un menor poder de compra para los hogares.
La inflación mide el aumento de precios en un periodo determinado. Como explica la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef): “el dinero vale menos y necesitas más para comprar las mismas cosas”.
Tipos de inflación
Banxico distingue dos componentes:
- Inflación subyacente: incluye alimentos, bebidas, tabaco, mercancías no alimenticias, servicios y vivienda. Es más estable y relevante para el diseño de políticas monetarias y fiscales.
- Inflación no subyacente: compuesta por alimentos sin procesar, energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, cuyos precios son más volátiles y dependen de factores externos como clima y regulaciones.
Ajuste de proyecciones
En su reciente anuncio de política monetaria, Banxico ajustó al alza sus previsiones de inflación subyacente:
- 4T 2025: de 3.7% a 4.0%.
- 1T 2026: de 3.5% a 3.6%.
- 2T 2026: de 3.1% a 3.2%.
El banco señaló que existe un sesgo al alza en los riesgos de la inflación y estimó que la inflación general converja a la meta de 3% hasta el 3T de 2026.
Impacto en los hogares
Aunque se espera una mejora en la inflación general, el componente que más afecta al bolsillo —la inflación subyacente— aumentará, según Banxico. Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base, explicó que la decisión de recortar la tasa de interés resulta contraria a la teoría económica, ya que el alza en la inflación subyacente demanda mayor control monetario.
Riesgos para la inflación
Banxico advirtió que sus proyecciones pueden verse afectadas por:
- Depreciación del peso mexicano.
- Conflictos geopolíticos o cambios en políticas comerciales.
- Persistencia de la inflación subyacente.
- Presiones de costos y condiciones climáticas.
Además, cambios de política económica de la nueva administración estadounidense generan incertidumbre y podrían aumentar las presiones inflacionarias, advirtió el banco central.