
Presidente, Claudia Sheinbaum / Redes Sociales
Por Rebeca Solano
Pese a que la virtual presidente, Claudia Sheinbaum, aseguró en junio que se había cubierto el 60% de la deuda con proveedores de Pemex, los datos oficiales desmienten esa afirmación: solo se ha pagado el 33%, y lejos de reducirse, la deuda aumentó.
Según cifras de Petróleos Mexicanos al segundo trimestre de 2025, la deuda con proveedores y contratistas asciende actualmente a 101 mil 900 millones de pesos, lo que representa un incremento del 6.4% respecto a marzo, cuando sumaba 95 mil 800 millones.
En enero, Sheinbaum prometió que “a todos se les iba a pagar” tras una reunión con el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, y el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O. La declaración generó expectativa entre cientos de empresas que llevan meses —algunas más de un año— esperando el pago por bienes y servicios ya entregados.
No obstante, la propia empresa productiva del Estado reconoce que, al corte del 30 de junio, solo ha podido cubrir un tercio de sus pasivos con proveedores. La situación ha generado incertidumbre en el sector energético, donde se reportan demoras en obras, cancelación de contratos y cierre de microempresas.
La promesa de pago fue uno de los compromisos clave en la campaña de Sheinbaum para asegurar la viabilidad operativa de Pemex, cuya deuda financiera total supera los 110 mil millones de dólares, colocándola como una de las petroleras más endeudadas del mundo.
El desfase entre el discurso político y los datos contables genera dudas sobre la capacidad real del próximo gobierno para sanear las finanzas de Pemex sin recurrir a más deuda o recortes.
