Rescataron a más de 700 personas víctimas de explotación laboral/ Redes Sociales
Por Rebeca Solano
En un impactante operativo, autoridades estatales y federales rescataron a más de 700 personas víctimas de explotación laboral en un rancho agrícola ubicado en el municipio de Dolores Hidalgo, Guanajuato.
La mayoría de las personas liberadas son originarias de Guerrero, Chiapas, Oaxaca y Veracruz, y presentaban signos evidentes de desnutrición, enfermedades respiratorias y afecciones dérmicas, producto de las inhumanas condiciones en que eran obligadas a vivir y trabajar.
Entre las víctimas se encontraban decenas de niños y niñas de todas las edades, quienes también realizaban labores agrícolas en jornadas extenuantes bajo el sol, sin acceso a servicios médicos, alimentación adecuada ni espacios dignos para el descanso. Los trabajadores eran alojados en cuartos improvisados, construidos con lonas y materiales precarios, donde dormían hacinados sin servicios básicos.
La Fiscalía General del Estado confirmó que se abrió una carpeta de investigación por el delito de trata de personas con fines de explotación laboral, y no descartó la participación de una red criminal dedicada al reclutamiento y traslado de jornaleros bajo engaños y promesas de empleo. De acuerdo con testimonios preliminares, muchas de las personas fueron llevadas al lugar mediante contratos verbales o mediante “enganchadores” que operan en comunidades marginadas del sur del país.
El rancho en cuestión habría estado operando desde hace varios años bajo estas condiciones, con la aparente complicidad o negligencia de autoridades locales. Por el momento, no se han reportado detenidos, pero las investigaciones continúan.
Organismos de derechos humanos y colectivos de jornaleros migrantes exigieron justicia y protección para las víctimas, así como una investigación profunda que alcance a los dueños del predio, los intermediarios y posibles funcionarios involucrados.
Este caso se suma a una larga lista de denuncias sobre explotación laboral en el sector agrícola mexicano, donde miles de personas, especialmente indígenas y migrantes internos, continúan trabajando en condiciones similares a la esclavitud.
Cabe hacer mención que el hecho ha causado una profunda indignación en redes sociales, donde usuarios, activistas y organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado su repudio ante la gravedad del caso.
Las imágenes y testimonios difundidos tras el operativo han generado una ola de comentarios que exigen justicia para las víctimas, castigo ejemplar para los responsables y una revisión urgente a las condiciones laborales en el campo mexicano. La etiqueta #EsclavitudModerna se ha vuelto tendencia, acompañada de llamados a no normalizar la explotación que persiste en sectores agrícolas del país.