
México enfrenta crisis de violencia mientras gobierno es criticado por su manejo
Por Rebeca Solano
El analista y comunicador Max Kaiser ha destacado que la principal causa de muerte en México para hombres de 14 a 44 años son los homicidios, superando incluso accidentes automovilísticos, accidentes laborales o enfermedades cardiovasculares. Según Kaiser, México registra más muertos que muchos países en guerra y ocupa el primer lugar mundial en desaparecidos.
El gobierno federal, encabezado por Morena y la presidenta de la Cámara, Klaus, ha sido criticado por no asumir responsabilidad sobre la creciente violencia. A pesar de las cifras alarmantes, la funcionaria mantiene que “todo está bien”, mientras algunos sectores internacionales, como Estados Unidos, han ofrecido ayuda para combatir el narcoterrorismo, oferta que ha generado indignación en el gobierno mexicano.
Kaiser señala que grandes partes del territorio nacional están fuera del control del gobierno, y que incluso en ciudades importantes como Monterrey se registra la práctica del “derecho de piso”, donde los negocios deben pagar a grupos criminales bajo amenaza de cierre, contribuyendo a la estadística de homicidios y desaparecidos.
Además, el analista critica las políticas del gobierno hacia la economía y los pequeños negocios: según él, la administración busca centralizar el control económico y eliminar la independencia de los pequeños empresarios y agricultores, mediante cambios constantes en la legislación que permiten más vigilancia y control sobre la población.
En el ámbito presupuestal, Kaiser advierte que se reducen recursos para salud, educación y mantenimiento de infraestructura, mientras aumentan los sueldos de diputados y senadores, situación que genera indignación entre la ciudadanía.
Finalmente, hace un llamado a la población: “Si nos unimos todos los mexicanos, podemos revertir lo que estas personas han hecho, incluso recobrar el poder judicial”, y anuncia que se llevará a cabo una gran marcha el 15 de noviembre para exigir la renuncia de legisladores considerados ilegales.
