27 de septiembre de 2025

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele / Internet

Por Rebeca Solano

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció este miércoles el retiro temporal de su embajador en México “para consultas”, en respuesta a declaraciones del secretario de Seguridad mexicano, Omar García Harfuch, quien afirmó que una avioneta vinculada al narcotráfico había salido del territorio salvadoreño antes de ser interceptada en el estado de Colima.

La versión fue negada rotundamente por el mandatario salvadoreño, quien a través de su cuenta en X (antes Twitter) exigió a México una aclaración oficial y la rectificación pública de la información. “El avión voló sobre el Océano Pacífico y nunca tocó territorio salvadoreño”, afirmó Bukele, acompañando su publicación con un mapa que muestra la supuesta trayectoria de la aeronave, partiendo desde el sur de Costa Rica y sobrevolando el mar rumbo al norte.

“Estamos convocando a nuestro embajador en México para consultas respecto a esta situación”, agregó Bukele, en una declaración que marca un claro enfriamiento en la relación bilateral.

En respuesta, García Harfuch publicó también un mapa con la ruta del avión, asegurando que fue detectado por primera vez a unos 200 kilómetros al sur de San Salvador, sin precisar si había salido directamente de territorio salvadoreño.

Las autoridades mexicanas informaron que tras el aterrizaje de la avioneta se logró la detención de tres personas y el decomiso de 427 kilogramos de cocaína. Bukele, por su parte, puntualizó que los tres ocupantes de la aeronave eran de nacionalidad mexicana, información que no había sido confirmada por el gobierno de México hasta ese momento.

“El Salvador no oculta criminales ni tolera el narcotráfico; no lo hicimos antes y no lo haremos ahora”, subrayó el presidente salvadoreño. “Tampoco permitiremos que intenten involucrarnos en operaciones que no son de nuestra responsabilidad”.

El incidente ha generado un aumento en la tensión diplomática entre ambos países y ha encendido un debate en redes sociales, donde usuarios de El Salvador han cerrado filas en torno a la postura de su presidente, mientras voces críticas en México exigen mayor precisión en las declaraciones oficiales sobre temas tan delicados como el narcotráfico internacional.