27 de septiembre de 2025

 

Jorge Eleazar Galván García, exalcalde del municipio de Burgos

Por Redacción

Jorge Eleazar Galván García, exalcalde del municipio de Burgos y militante del Partido Acción Nacional (PAN), fue asesinado a tiros este sábado en una comunidad rural de la entidad, confirmaron autoridades estatales.

De acuerdo con la Vocería de Seguridad de Tamaulipas, elementos de la Guardia Estatal atendieron un reporte en el Ejido Lázaro Cárdenas, donde localizaron el cuerpo del exedil, conocido popularmente como “El Potrillo”, con impactos de arma de fuego. Testigos indicaron que en el Ejido La Colmena, un vehículo blanco abrió fuego antes de huir de la zona. Hasta el momento, no se han reportado detenciones.

El asesinato de Galván García se suma a una serie de atentados contra políticos en Tamaulipas en los últimos dos años, evidenciando el persistente clima de violencia en la entidad. Según registros, al menos ocho políticos, exfuncionarios y candidatos han sido atacados, algunos durante campañas o funciones oficiales.

Entre los casos recientes destacan:

  • Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, delegado de la FGR en Reynosa, asesinado tras un ataque a su camioneta en agosto de 2024;
  • Noé Ramos Ferretiz, alcalde con licencia de El Mante, apuñalado durante un acto proselitista en abril de 2024;
  • Pedro Salazar Rodríguez, candidato de Movimiento Ciudadano en Jiménez, atacado un mes después, con cinco heridos;
  • Corina Esther Garza Arreola, aspirante del PVEM a la alcaldía de Jiménez, víctima de un ataque a su vivienda;
  • Eduardo Alvarado García, exalcalde panista de Padilla, herido en un atentado;
  • Édgar Danés Rojas, presidente del Tribunal Electoral local, recibió dos impactos de bala;
  • Vicente Verástegui Ostos, diputado panista, sobrevivió a un intento de secuestro en octubre de 2024.

El PAN calificó el asesinato de Galván García como un “crimen artero” y exigió a las autoridades el esclarecimiento del caso y la protección de exediles y candidatos.

Expertos en seguridad señalan que la escalada de violencia refleja la vulnerabilidad de la clase política en Tamaulipas, especialmente en zonas rurales y carreteras, donde operan diversas facciones criminales en disputa por el control territorial.