Derriban casas en Reynosa
Por Rebeca Solano
En la colonia 23 de Marzo, Reynosa, más de 300 familias fueron desalojadas con uso excesivo de violencia por autoridades del estado de Tamaulipas y la Fiscalía estatal. Entre los afectados hay numerosos menores de edad, quienes presenciaron impotentes la demolición de sus hogares.
Las casas fueron derribadas con tractocamiones frente a las mismas familias, destruyendo su patrimonio. Los habitantes aseguran que llevan más de diez años habitando el lugar, al que llegaron de forma irregular y donde construyeron viviendas, escuelas e incluso una iglesia.
Las autoridades argumentan que se trata de una propiedad privada, aunque no han precisado quién es el dueño. Los pobladores aseguran que, durante campañas políticas, tanto Morena con Américo Villarreal como el exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca, les prometieron regularizar los predios debido a que las casas ya estaban edificadas.
Actualmente, ninguna autoridad se ha pronunciado al respecto. Las viviendas fueron derribadas con todo y muebles, incluyendo pertenencias de las familias que se negaron a abandonar el lugar. En esta acción, las familias lo perdieron todo.
Aunque debe respetarse la ley, la forma en que se ejecutó el desalojo —sin previo aviso y con crueldad evidente— resulta inadmisible. Imágenes y videos muestran cómo elementos policiacos golpearon a habitantes, lo que no puede considerarse un acto jurídico justificado.
La manera en que derribaron las casas frente a menores de edad evidencia, según los afectados, la indolencia y crueldad del gobierno de Américo Villarreal, que aparentemente ignora el sufrimiento de las familias tamaulipecas.
Se espera que las autoridades aclaren los hechos y busquen alternativas para apoyar a las familias afectadas.