Habitantes de Oxitempa
Por María Fernández
La comunidad de Oxitempa enfrenta una grave situación tras el desbordamiento de los ríos Chiflón y Vinazco hace seis días, que dejó prácticamente todas las casas dañadas, sin electricidad, agua potable ni comunicación. Los vecinos denuncian abandono total por parte de las autoridades.
El comandante Víctor Ortega Hernández describió que las viviendas, muchas de madera y lámina, quedaron desplomadas o cubiertas de lodo, mientras muebles, colchones y electrodomésticos fueron arrastrados por la corriente. La comunidad depende de la solidaridad vecinal, ya que no ha recibido ayuda de la Marina, el Ejército ni la Guardia Nacional.
El agente municipal Arturo Salas Méndez señaló que, a pesar de que otros lugares afectados han recibido apoyo, en Oxitempa no ha llegado ninguna ayuda oficial, dejando a la población sin comida, agua, ropa ni artículos de higiene.
Los pobladores criticaron también las declaraciones de la gobernadora Rocío Nahle, quien aseguró que el río Cazones se había desbordado “ligeramente”, mientras que la comunidad enfrenta una devastación total, aumentando la frustración y enojo entre sus habitantes.
“Aquí, lo que es la Guardia y la Marina, nada. Nada, nada, nada, nada”, reiteró Ortega, mientras Salas agregó: “Sí se oye que en otros lugares está feo, pero aquí nos han abandonado por completo”.
Los vecinos hacen un llamado urgente a las autoridades para que atiendan la emergencia humanitaria y lleven ayuda inmediata a Oxitempa.
