17 de noviembre de 2025

Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán  / Internet

Por Receba Solano

Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, se declaró culpable ante una corte federal en Chicago de coordinar una red internacional de narcotráfico, lavado de dinero y operaciones criminales, en un acuerdo judicial con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.

El líder del ala más reciente del Cártel de Sinaloa admitió haber utilizado criptomonedas para mover millones de dólares en operaciones ilegales, incluyendo sobornos a funcionarios mexicanos, la compra de precursores químicos en China, y el financiamiento de redes clandestinas en Venezuela, Filipinas y otros países asiáticos. Como parte del mismo acuerdo, el gobierno estadounidense confiscó millones en criptoactivos, incluyendo USDT y otras monedas digitales asociadas al narcotráfico.

Pero la revelación más impactante surgió con los testimonios presentados en el mismo caso: Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, habría recibido más de 40 millones de dólares del Cártel de Sinaloa en 2024, parte en efectivo y parte en criptomonedas.

De acuerdo con estos testimonios, al menos 10 millones de dólares fueron destinados a fines personales, mientras que el resto del dinero fue triangulado a través de redes financieras clandestinas en Venezuela, entre ellas el llamado Cártel de los Soles, operado por allegados al régimen de Nicolás Maduro. Posteriormente, los fondos fueron transferidos a proyectos inmobiliarios en China y Filipinas, mediante el uso de empresas pantalla y fondos de inversión opacos, con el objetivo de ocultar su origen ilícito.

Las implicaciones de estas revelaciones podrían sacudir profundamente el panorama político en México, generando nuevas exigencias de rendición de cuentas y una investigación internacional más amplia sobre las relaciones entre el narcotráfico, los flujos financieros digitales y figuras políticas de alto perfil.