30 de noviembre de 2025

 

Campesinos de Campeche reclaman entre gritos y golpes en la mesa el incumplimiento en compra de maíz

Por Rebeca Solano

La tensión estalló en Campeche. Campesinos productores de maíz increparon con gritos y golpes en la mesa al subsecretario de Desarrollo Agrario del gobierno federal, Leonel Cota Montaño, por el incumplimiento del compromiso de garantizar mercado para 700 mil toneladas de maíz y un precio de 7 mil 200 pesos por tonelada, como les fue prometido.

La reunión se realizó el 20 de noviembre, en la sala de juntas de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario estatal, donde los maiceros reprocharon la ausencia de directivos de Maseca, Minsa, Bachoco, Kekén y Crío, empresas que —acusaron— prefieren importar maíz transgénico de Brasil y Estados Unidos antes que comprar la producción local.

Los productores explicaron que existe un acuerdo preliminar para que Segalmex compre 64 mil toneladas a 6 mil 200 pesos, más un subsidio federal de 850 pesos por tonelada y 150 pesos del gobierno estatal, con lo que se alcanzaría el precio acordado de 7 mil 200 pesos.

Sin embargo, no hay ningún convenio con las grandes empresas consumidoras de grano, esenciales para garantizar la compra total de la cosecha destinada a harina de maíz, tortillas y alimento para granjas avícolas y porcícolas.

Ante la falta de avances, los campesinos amenazaron con bloquear el ingreso de productos de Maseca, Minsa, Bachoco, Kekén y Crío si en la reunión programada para el próximo martes no se llega a un acuerdo.

La reunión del jueves pasado se tornó aún más tensa debido a la falta de respuestas de Cota Montaño, quien fue señalado por los labriegos de no lograr sentar a los empresarios en la mesa de negociación para definir el precio de garantía del maíz blanco producido en la entidad.

Los agricultores de Campeche, Calkiní, Hecelchakán, Tenabo y Hopelchén recordaron que el 14 de noviembre funcionarios federales y estatales les prometieron comprar la totalidad de la producción estatal, estimada en 700 mil toneladas, y que en la reunión reciente estarían presentes los representantes industriales, promesa que tampoco se cumplió.