La mayoría de Morena y sus aliados aprobaron en el pleno de la Cámara de Diputados la reforma para crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar, el cual se financiará con los ahorros para el retiro en las Afores que no hayan sido reclamados por personas de 70 años o más.
Por 252 votos a favor, 212 en contra y cuatro abstenciones, la mayoría oficialista logró la aprobación del dictamen en lo general.
La aprobación de la reforma para crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar en la Cámara de Diputados ha generado un debate intenso. La iniciativa, respaldada principalmente por Morena y sus aliados, busca complementar las pensiones de los trabajadores que se jubilen bajo el sistema Afore a los 65 años y cuya pensión sea igual o menor al salario promedio registrado en el IMSS.
Sin embargo, hay preocupaciones y críticas sobre varios aspectos de la reforma. Una de las principales incertidumbres es el monto del complemento que se dará a las pensiones. El dictamen no especifica cuánto será este apoyo ni si garantizará que los trabajadores obtengan una pensión equivalente a su último salario.
Además, se advierte que la disponibilidad de recursos del Fondo y las reglas para otorgar el complemento estarán sujetas a la suficiencia del Fondo y a las disposiciones que emita la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Esta falta de detalles y la incertidumbre sobre el manejo de los fondos han generado críticas y preocupaciones sobre la efectividad y transparencia del nuevo sistema.
Por otro lado, las amenazas de la oposición de impugnar la reforma ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) también reflejan la división y el desacuerdo sobre este tema. El diputado del Partido del Trabajo (PT), Gerardo Fernández Noroña, expresó la determinación de su partido y la mayoría oficialista de seguir adelante con la reforma a pesar de las críticas y oposiciones.
En resumen, mientras que la reforma tiene como objetivo proporcionar un complemento a las pensiones para mejorar la situación de los jubilados, la falta de detalles específicos y la incertidumbre sobre el manejo de los fondos han generado debates y críticas tanto dentro como fuera del Congreso