Miércoles, 1 de May de 2024


Columna: Columna Invitada

“Un criterio oportuno”

Jueves, 26 Noviembre 2020
  • Por:  alejandro hernández lópez/Arte y Mester

 

Aquí -donde todo es posible como en el mundo de la fantasía- ahora resulta que el precedente que dejó el señor petróleo será bien aprovechado por la señora quitahambre, hágame usted el recabrón favor, dijera Tinita la de la cantina de mi pueblo allá en San Juan de Los Llanos.

Y claro que en el guión –de esta miniserie que ya pronto viene- está remarcado que el señor del hermanocómico  rezongando la haga de pedo desde el extranjero allá, donde puso sus barbas a remojar. La señora quitahambre ahora cantará, recitará, declamará, ofrecerá –como pitonisa- declaraciones con valiosa información que antes o mintió u omitió o quizás antes -de verdad- no  sabía. Como dijo ella yo nunca supe cómo se chingaron la lana aunque dicen que fue en mis narizotas, yo nunca me di cuenta.

Pero hoy la señora quitahambre amaneció lucida recordando cosas importantes y chance hasta videos (inculpadores) tiene igual que el señor petróleo. Ahora la señora quitahambre dice que ella si sabe a dónde se fue ese dinero aunque tristemente sigue desconociendo cómo y quién se lo chingó.

Vamos, ella sabe a dónde fue a parar ese dinero, pero no sabe de dónde salió ¡ah cabrón!

Estos pendejos siguen creyendo -en su puta realidad- que el mundo de la política y los votos siempre se deben obtener así, con historietas de farsa y plena corrupción, de impunidad y plena impunidad, de prevaricación, que todo debe ser una estafa cada vez mayor. Se juegan al país en “un volado”.

Lo triste es que junto a ellos se han desaparecido enormes cantidades de dinero y no ha pasado nada, absolutamente nada que no sea un pinche barato, cargado y lleno de imbecilidad show mediático electorero, soez y corriente -para estos tiempos- cuando todos sabemos que ya hay leche en polvo.

Y ahora como si el pueblo fuera tonto, ahora presentan esta miniserie mucho más chingona que las que se producen en netflix. Previo a los tiempos electorales, previo a los votos, ahora nos presentan: “YO SOY TESTIGO, PERO NO DE JEHOVA”.

Agárrate chango y toma tu banana. Porque ahora traemos cosa fresca: De ser engañada por el señor argentino, de ser traicionera, de su oculto papel de maestra estafadora, ahora traemos para usted a la testigo protegida, a la aprovechada del criterio de oportunidad, a la testigo colaborador.

Todo por ganar la libertad, todo por la libertad, nomás por la libertad, se los juro que es por eso, por la libertad. Libertad a cambio de información sobre el caso aquel que desconocía pero que ahora conoce a perfección, que ahora ya sabe si no todo, casi todo. O sea que se puede saber y al mismo tiempo no saber, la señora quitahambre si es cabrona ella prueba que el mismo ente puede estar en dos lugares siendo él mismo al mismo tiempo.

Estos cabrones son en verdad despreciables y enemigos de la sociedad, no tienen perdón de dios: mira que robarse el dinero de los (más) pobres, el dinero de los que tienen hambre, el dinero de los más vulnerables.

Son en verdad cínicos, pero sorprendentes, enormemente sorprendentes al grado que aparentan bien eso que hacen como si fueran ocurrencias, pero en realidad es un pinche plan bien armado que incluye a todos -los de ahora y los de ayer-, con guión, con sus pinches aparentes y ocurrentes imbecilidades para distraer al enemigo y chingarse los dineros, sin mayor pedo que después gozar de la libertad. Y para eso se han usado universidades, payasos que hoy andan ofendidos, se han usado liguitas, bolsas plásticas, maletas que viajan en avionetas y todo tipo de disfraz, han usado hasta fantasmas.

Bien cantan Los Tigres del Norte, aquella letra que dice: Una mujer por un hombre / puede dar la vida / pero hay que tener cuidado / si esa hembra se siente herida… En este guión se vale de todo, se vale recodar que no recordaba, se vale decir: paciencia y prudencia, verbal continencia… según conveniencia… y pitorrearse de todos como aquel señor vozdesirenacuerpodecachalote.

Así son los acuerdos entre ellos, así se las gastan, así nos la venden, en episodios directos a nuestras casas y todo financiado con recursos de nosotros, con dinero que estaba destinado a mitigar el hambre de muchos en este país, todo, todo pagado por nosotros. Qué razón le atina a estas palabras: no hay nada más mierda y culero que alguien trabajando con tu dinero, ganando con tu dinero, viviendo de tu dinero.

El dinero de todos nosotros en unos cuantos que -incluso- ni trabajan nomás viven de ese dinero y en su momento se lo roban, se lo birlan, lo desaparecen y viven felices para siempre, aquí donde todo es posible como en el mundo de la fantasía. Verdad, Manuel.

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