El vocero del PRI en Veracruz, Marco Antonio del Ángel Arroyo, acusó a la dirigencia de su partido, a cargo de Américo Zúñiga y a otros "piratas’ enquistados en su partido de negociar con el gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares.
Aseguró que en ningún momento ejercieron su papel de oposición y mantuvieron un silencio ante el desempeño monárquico del mandatario.
En ese sentido, el heredero de los 400 pueblos, consideró que Zúñiga Martínez debe dejar la dirigencia porque no supo ejercer su papel y se mantuvo en la comodidad.
“El problema de Américo es de estar con quien está en el poder, no le gusta lo duro, no le gusta luchar ni convocar, él a la comodidad”, manifestó.
El vocero priista, reiteró que además de Américo Zúñiga, otros liderazgos y diputados de su partido pactaron con Yunes Linares para apoyar a su hijo en la lucha por la Gubernatura.
Criticó que hayan actuado en lo “obscurito” cuando Veracruz es un estado democrático.
Refirió que muestra de ello es que nunca criticaron o alzaron la voz en contra del fiscal Jorge Winckler y del secretario de Seguridad Publica, Jaime Téllez Marie, cuando recibieron señalamientos de la sociedad civil y de la propia PGR.
No obstante, presumió que fue el único que desde que inicio la presenta administración estatal ha ejercido una crítica sistemática contra Yunes Linares.
Aclaró por último que no está interesado en buscar la dirigencia estatal sino en sacar a su padre y a otros liderazgos de la cárcel y que se aplique la ley en contra del mandatario estatal por el presunto abuso de poder que está cometiendo.
“Pediré al nuevo gobierno federal y del estado que haga una investigación en contra de Miguel Ángel Yunes Linares, queremos limpiar y dar autonomía a las instituciones, que no le sirvan la procuración de justicia, la seguridad pública y las finanzas del Estado a una familia”, finalizó.