El ex gobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa afirmó que su entrega ante las autoridades fue pactada con funcionarios del entonces gobierno federal que encabezaba el ex presidente de México, Enrique Peña Nieto.
"Sí (pacté mi entrega) a través de mis abogados de aquel entonces. Se hizo una mesa de trabajo entre mi abogado (quien era Marco Antonio del Toro) en la Ciudad de México y donde participaron funcionarios de aquella administración, el Cisen, de Gobernación y de la PGR".
Hay que recordar que Javier Duarte de Ochoa fue detenido en abril de 2017, en abril de 2017, en Guatemala, y extraditado a México en julio de ese mismo año. Desde entonces, permanece preso en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte de la Ciudad de México.
Los titulares de esas dependencias en ese momento eran Eugenio Ímaz (Cisen), Miguel Ángel Osorio Chong (Gobernación) y Raúl Cervantes (Procuraduría General de la República).
"Me entregué a cambio de que dejaran de molestar a mi familia. Yo puedo aguantar lo que sea. Cuando uno entra a la esfera pública, está consciente d ela exposición a la que puedes estar sometido, pero la familia nada tiene que ver. Ni Karime ni mis hijos fueron funcionarios públicos (…) Me dijeron 'debes entregarte antes de la elecciones a gobernador del Estado de México' en junio de 2017 y yo me entregué en abril, para que dejar en paz a mi familia y pueda irse a un lugar seguro. Evidentemente fue otro engaño más de la administración, no tenía para dónde hacerme, era sí o sí".
Javier Duarte, afirmó que pagó una presunta extorsión al ex encargado de despacho de la Procuraduría General de la República, Alberto Elías Beltrán, para que dejaran en paz a su familia y le quitaran el delito de delincuencia organizada, para conseguir una sentencia más baja.
Aseguró que Felipe Muñoz Vázquez, quien hasta el mes pasado fuera titular de la Subprocuraduría de Delitos Federales, también fue beneficiario del mencionado pago.
Señaló que la presunta extorsión fue a través de un amigo en común con el ex presidente Enrique Peña Nieto, quien aseguró le regaló una suma de dinero para ayudarlo “porque tenía cargos de conciencia" por la persecución que padecía.
Detalló que el dinero se lo entregaron a su hermano Cecil Duarte en una casa de la Ciudad de México y él lo entregó a los funcionarios de la PGR.
“O sea, el mundo al revés, me dio dinero el ex presidente Peña para poderle dar un soborno a sus propios funcionarios; se entregó el recurso tanto al ex titular de la PGR como al subprocurador, en aquel entonces, Felipe Muñoz, porque están metidos tanto Elías Beltrán como Felipe Muñoz (…) Fue una extorsión hacia mi persona donde me amenazaron con la integridad y con la vida misma de mi familia, no tuve de otra más que hacer eso. Esto no es un cohecho, esto es una extorsión, me extorsionaron: fui extorsionado y tuve que pagar para que dejaran a mi familia en paz y para que aceptara todas las pruebas que me fabricaron en mi contra".